Es indudable que necesitamos cultivar nuestra mente para
poder tener una vida feliz y productiva. Buscamos conocimientos que le den sentido a nuestra existencia, más allá de lo material.
Pero somos esencialmente seres que se mueven en la materia.
Por eso utilizaré una analogía sobre el desarrollo de nuestra mente basada en la naturaleza.
De manera similar a lo que pasa con las plantas necesitamos buenas
semillas y buena tierra para desarrollarnos.
La buena tierra no siempre se encuentra naturalmente disponible y
entonces tenemos que mejorarla por medio de trabajarla con herramientas y
agregarle abonos, fertilizantes, en lo posible naturales y no artificiales,
pues no conocemos los efectos secundarios de los agro-químicos industriales.
Muchas veces en nuestra búsqueda del conocimiento que nos
lleve a la felicidad y el buen vivir encontramos gente que difunde conocimiento
que aunque parece natural termina siendo tan perjudicial como un agro-tóxico.
Claro que los agrotóxicos no se presentan bajo ese nombre, pero nos damos
cuenta tarde muchas veces de los efectos de estos malos fertilizantes.
Los efectos dañinos de ese conocimiento aparentemente
benigno solamente se notan con el paso del tiempo.
Puede ser que el efecto sea potenciar malas actitudes por
medio de naturalizarlas así como introducir nuevas ideas que nos vuelven
insensibles a los sentimientos naturales de bondad y compasión porque estas
nuevas ideas aparentemente provienen de la mente Divina. Así cuando creemos estar
amoldando nuestra mente a la de Dios en realidad simplemente estamos siendo dominados por ideas
de hombres egoístas que lo único que quieren es tomar control sobre nuestras vidas.
Una buena idea (texto en inglés) bien traducida (texto
central resaltado en negro) cuyo sentido se tergiversa y pierde fuerza en la
traducción final para la revista en castellano (el tercer párrafo).
Una
vez le pregunté a Charles Eisenhower, que en ese momento estaba a cargo de la
sucursal de los Testigos de Jehová en Argentina por qué existían estas
diferencias entre las versiones originales en inglés y las traducciones al
castellano.
Su
respuesta fue tan confusa que allí aprendí lo que era la sanata.
Varias
ideas horribles en publicaciones de los
Testigos de Jehová que condicionan el pensamiento y la vida de esta gente.
Racismo
Misoginia
Culpabilizar
a la víctima
Justificación
de los violadores
Represión
sexual
Homofobia
Obediencia
ciega
La imagen precedente es una captura de un video que analiza estas cuestiones
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